IMAGEN: 9
Una imagen realmente notable. Excelente definición, claridad cristalina y limpia. Sin efectos de grano. Formato 1:85 (sin franjas negras). Si tuviera una fotografía menos oscura, con menos filtros, más "soleada", sin duda merecería una nota superior.
Pero no tendría sentido, sería contradictorio. Porque en una película de esta naturaleza "tormentosa", la fotografía que tiene es exactamente la que se espera.
SONIDO 10
Un sonido de absoluta referencia. De los mejores que he escuchado en años. A pesar de que algunos quieren ver absurdas conspiraciones en las pistas Dolby Warner-Paramount, lo cierto es que la pista castellana tiene un sonido de altísimo nivel.
¿Deberían vendernos pistas de audio con mayor bitrate y no tan comprimidas? Está claro. Pero cuando uno escucha ese agresivo surround en los efectos ventosos y ese brutal subwoofer que baja a frecuencias de 20 hz, de imponente e insuperable potencia, uno entonces ya se olvida de todo prejuicio. Porque la realidad desborda a la teoría. Ya al comienzo de la peli empieza avisando al audiófilo. Pero a partir del minuto 28 y hasta el final, el orden se convierte en caos. Y es un "caos" de gran nivel.
Es muy difícil encontrar BDs de este nivel sobresaliente. Deja a pelis como Twister en ridículo. Cosa normal porque es ya del año 96. Y lo que en su día era referencia, con el paso de los años no ha envejecido tan bien, al compararlo con producciones actuales. Tiene un canal LFE más potente, un mayor cuerpo y uso de frecuencias medias en frontales-traseros, unos canales mejor separados y una mayor precisión en efectos más sutiles, incluído el canal central.
La peli en sí es simplemente un pasatiempo de 80 minutos. Pero escucharla en 5.1 la transforma. La lleva a un nivel diferente, a una dimensión superior. Unas sensaciones que no sentiríamos escuchándola en monoaural o stereo. Porque simplemente lleva a vuestro equipo multi-canal al límite de sus capacidades.
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